¡Cómo va pasando el tiempo! 50 años va a cumplir el instituto Hermanos
D'Elhuyar. Lo primero que me viene a la mente es cuando nos dejaron entrar a
las féminas, los fines de semana, a las actividades extraescolares. Pues era un
instituto sólo masculino. ¡Y quién iba a decirme a mí que, después de unos
cuantos años, iba a venir a trabajar aquí! No como Diplomada en E.G.B., sino
como subalterno, que es como nos llaman ahora. Mi vocación, de una forma
indirecta, he podido satisfacerla al estar en contacto con alumnos. Con los cuales,
siempre que tenía ocasión, ponía mi granito de arena. No sé lo que dirán ellos.
No creo que haya sido muy sargento. Por el cariño que me demuestran cuando me
ven. A algunos aún los tengo en mi Facebook y en mi Whatsapp. Agradezco también
a sus padres que pusieron su confianza en mí; con algunos de ellos aún sigo en
contacto.
Tampoco puedo
olvidarme de todos los compañeros que, a lo largo de unos 20 años que he pasado
ahí, he llegado a conocer un poquito. Compañeros como operarios, subalternos, los
de secretaría y profesores, que han sido muchos. Cambios de directivos. TODOS
me han enriquecido como persona, de todos he aprendido y también han aprendido
de mí.
Otra experiencia más ha sido tener el privilegio de pertenecer al coro
Sentire D’Elhuyar, dirigido por Silvana Laguna, a la cual admiro por su
saber hacer y conseguir que se cumpliera una ilusión mía. Ahora, ya jubilada,
siento una alegre nostalgia de todo lo vivido. Alegre porque me quedo con los
momentos mejores. Aunque haya habido de todo, hemos tenido que hacer y aprender
a hacer muchas cosas, unas veces bien y otras menos bien, siempre con la
satisfacción de haberlo hecho con nuestra mejor intención. Gracias, gracias a
todos los que han pasado por mi vida aquí.
Carmen Montero
Moral
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